Elaboración tradicional del sake: Patrimonio Cultural Inmaterial
La UNESCO ha inscrito recientemente la elaboración tradicional del sake japonés en su lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Este reconocimiento destaca la relevancia de esta bebida ancestral en la cultura y religión de Japón.
Un proceso milenario
El sake, un licor de arroz con más de mil años de historia, es esencial en ceremonias sintoístas y celebraciones japonesas. Su proceso de producción, que incluye la fermentación múltiple paralela mediante el uso del hongo koji, ha sido transmitido de generación en generación, adaptándose a las particularidades climáticas y geográficas de cada región.
Desafíos para la tradición en la elaboración del sake
A pesar de su profundo arraigo cultural, el consumo de sake en Japón ha disminuido en las últimas décadas, influenciado por la popularidad de otras bebidas como la cerveza y el vino. En 2023, los japoneses consumieron 390 millones de litros de sake, una reducción significativa en comparación con los 1.700 millones de litros registrados en 1973.
Un futuro prometedor
Las autoridades y productores esperan que este reconocimiento internacional revitalice el interés por el sake, especialmente entre las generaciones más jóvenes, y promueva su consumo tanto a nivel nacional como internacional. Actualmente, existen alrededor de 1.400 fábricas de sake en funcionamiento en Japón, y su producción se ha expandido a países como Francia, Estados Unidos y Nueva Zelanda.
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